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Decoración con aires escoceses

La moda de este año ha traído de vuelta la tendencia de los cuadros escoceses. La ropa y los complementos se han llenado de cuadros para ofrecer un homenaje a ese país del norte. Los diseñadores han traspasado la barrera de las faldas para llevar estos motivos de los antiguos clanes a todas las prendas posibles y la decoración no iba a ser menos. Los cuadros escoceses se imponen para dar un toque original o clásico a las casas.

Este motivo decorativo, muy relacionado con los colores verde, rojo y azul en sus variaciones más tradicionales, ha sabido modernizarse para llegar a los hogares en cualquier tono. Predominando el blanco como fondo de las telas y el negro para trazar los cuadros, hoy en día el mercado ofrece infinidad de estampados en tonos azules, morados, naranjas e incluso rosas, una gran paleta de colores para adaptarse a todo tipo de hogares y estancias.

El estampado de cuadros se puede usar como elemento principal de la decoración de una habitación, por ejemplo la juvenil, y utilizarlo en colchas, cortinas, alfombras, sillas… De esta original forma la habitación será diferente a todas las demás y del color que desee el dueño, puesto que hay cuadros de todos los gustos. Ante una habitación de este estilo, se recomienda paredes lisas; blancas o de un color no muy llamativo que predomine en el estampado.

Otra forma de decorar con cuadros escoceses, sin que resulte demasiado cargado, consiste en sólo utilizar este motivo para pequeños complementos como los cojines del sofá, la parte superior de unas cortinas lisas, los manteles de mesas auxiliares o pequeñas pinturas y tapices. Estos detalles son muy recomendables es salones o comedores. Dependiendo de la tonalidad de los cuadros y su tamaño, y el estilo del salón, éstos estampados le ofrecerán un estilo más clásico o moderno.

Por último, para los fanáticos de estos cuadros, se puede pintar una pared con estos motivos, o ponerla con papel pintado, mucho más cómodo y con mayores garantías de éxito. Un homenaje a los clanes escoceses favoritos, o un elemento trasgresor utilizando colores fuera de lo común. Dependiendo de la estancia se recomienda una pared con los cuadros y el resto con el color de fondo, o con un tono que destaque. El azul clarito o malva son perfectos para los dormitorios.

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